
"Del todo al todo" – es nuestro mantra para esta semana. Aquí estamos ... ¡Nunca pensé que pasaría tan rápido! Ya estamos casi en la etapa final. Puedo imaginar lo que algunos piensan: No puede ser que haya terminado ya – no estoy preparado y, sobre todo, no he logrado sentir alegría en todo momento, mis posturas están lejos de ser perfectas, aún no conecto con mi corazón y por supuesto ¡todavía no sigo a pies juntillas la rutina que me prometí a mí mismo que haría todos los días!
Sea lo que sea que hiciste, no te preocupes porque lo hiciste lo mejor que
Si en este momento sientes o piensas cualquiera de las frases mencionadas anteriormente, tengo que decirte honestamente que ¡Realmente hiciste un gran trabajo! Estuviste trabajando duro, tal vez demasiado duro y tal vez lo que realmente necesitabas para sentir alegría en todo momento, era intentarlo con menos intensidad y aceptarte a ti mismo como eres – con una sonrisa en la cara y alegría en el corazón.
Negativos y positivos, buenos y malos – todos forman parte del todo
Cuando estableces una intención y trabajas para cumplirla, puedes sentirte frustrado a veces, especialmente cuando empiezas a compararte con otros. Puedes sentir culpa, ira, tristeza o decepción. No eres el único que tiene estas emociones – nos suceden a todos. A veces, al ser bombardeado con imágenes de cuerpos perfectos, piel, pelo, salud, comida y estilo de vida por todos lados, puedes comenzar a sentirte imperfecto. Personalmente, creo que esto es muy triste. Cuando nos sentimos así no queremos ver a nadie y nos escondemos, hasta que nos sintamos perfectos de nuevo.
La verdadera perfección es aprender a ser feliz con nuestras imperfecciones
Siendo una promotora de un estilo de vida sano y equilibrado, me presioné mucho y durante mucho tiempo creí que para poder enseñar a otros, tenía que ser perfecta y totalmente equilibrada. Sin embargo, cuanto más intentaba ser esa persona, menos funcionaba. Hasta que un día algo hizo clic y este fue el primer día en mi vida en el que realmente disfruté estar enfadada y molesta. Desde entonces, siempre he permitido que mis emociones salgan a la superficie. No me avergüenzo ni me preocupa confesar tener sentimientos de ira, tristeza o preocupación, etc. Ser capaz de aceptar cualquier tipo de emoción a medida que surjan me permite generar alegría y un equilibrio perfecto dentro de mí. Sé que las lágrimas pasarán y que estoy perfectamente bien tal y como soy.
Estos son algunos consejos para esta última semana:
- Utiliza tu respiración: Para o siéntate, cierra los ojos, conecta con la tierra, conecta con el cielo y luego atrae ambas fuerzas hacia tu corazón, sintiendo todo el universo dentro de ti. Siente tu fuerza y la conexión de todo el mundo y todo lo que te rodea, sabiendo que el universo está dentro de ti y que tienes el poder de manifestar lo que quieras. Siente la unidad y la energía curativa. Practica la ecuanimidad con cualquier tipo de pensamientos o emociones a medida que surjan. Utiliza inciensos de franquincienso, mirra, hisopo o helichrysum.
- Siente y conéctate: Conéctate a tu naturaleza pura e inocente esta semana sin influencias externas. Recuerda lo que era ser un niño – cuando estabas super relajado y actuabas de una forma natural. Encuentra tu niño interior y tráelo a jugar esta semana, permanece junto a este niño, haz locuras y tantas cosas inusuales como sea posible y disfruta.
- Nutre y cuida tu digestión: Prueba una dieta rica en fibra, granos enteros y verduras. En lugar de agua puedes rehidratar tu cuerpo comiendo coco y beber agua de coco. Para disminuir el consumo de azúcar, sustitúyelo por estevia.
- Crea: Conéctate con las personas que te rodean, tu comunidad y toma la iniciativa para crear algo juntos. Trabaja teniendo un objetivo común, une fuerzas y siente lo interconectados que todos estamos. Crea un evento para personas necesitadas o una reunión maravillosa para tu pueblo, amigos o familia. Ten en cuenta que todos tenemos deseos y necesidades muy similares.
- Muévete conscientemente usando Asanas o posturas de Yoga para alcanzar más maestría en la vida: SARVANGASANA – POSTURA DE VELA.
Elegir la alegría significa aceptarte en cada momento de tu vida con amor incondicional y humildad. Dedícale algo de tiempo y practica. No importa cuánto tiempo te lleve, un día llegarás. Cuando empieces a disfrutar, aceptar y observar tus emociones sin juzgarlas ni analizarlas, empiezan a aparecer menos a menudo y tienen menos impacto en nosotros.
Si tienes alguna pregunta, te gustaría compartir tus experiencias conmigo, discutir alguna de las técnicas en detalle, o reservar una sesión privada, escríbame a: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo..
