
Después de aterrizar, centrar, desarrollar tu fuerza, aprender a perdonar y permanecer presente en lo que sea, ahora es el momento de descansar y practicar la paciencia. Puedes encontrarlo extraño, sin embargo, esta es una de las virtudes que muchos se olvidan de desarrollar en su camino a conseguir sus objetivos. Han pasado 40 días desde el comienzo de tu práctica, el tiempo mínimo necesario para que se formen nuevos hábitos, permitiéndote internalizarlos y actuar de una forma natural, de acuerdo con ellos. Por lo tanto, es el momento perfecto para descansar.
A veces romper con la rutina es lo que necesitas
Con el fin de lograr con éxito tus objetivos, a veces tienes que descansar, rejuvenecer y almacenar energía para lo que está por venir. Esta semana, te animo a que te tomes algo de tiempo, hagas una pausa, respires, te relajes, liberes cualquier estrés, liberes la energía en forma de frustración de cosas que debías haber hecho o debían haber sucedido el día anterior pero no lo hicieron y restaurar tu energía. Para ello puedes simplemente respirar profundamente o si tienes tiempo, descansa un poco más durante unos días o incluso una semana. A veces, tomarte un descanso te ayuda no sólo a ver las cosas de manera diferente y a ser más creativo, sino también a lograr cosas que jamás conseguirías si no te detuvieras.
Descansa activamente – disfruta la naturaleza
Sentarte en frente de la televisión o permanecer en torno a los medios de comunicación social no te ayuda a descansar. Trata de salir y disfrutar la naturaleza. Obsérvala a ella y a toda la frutas que proporciona y recoge algunas de las plantas/frutas que te hablen. Mezcla las frutas recién exprimidas que recogiste con agua y disfruta del sabor. Puedes agregar un poco de planta de hierba de limón o menta para relajar tu mente y tu cuerpo. Trata de endulzar tu increíble bebida con miel casera, nutriéndote y dándole a tu cuerpo todo lo que necesita.
Tan simple, tan puro y con efecto inmediato
¿Por qué la naturaleza? Cuando vas a disfrutar del aire fresco en la naturaleza, su pureza refleja la belleza que llevas dentro y ésta es la razón por la que la relajación y alegría se producen al instante cuando te encuentras rodeado por la naturaleza. Sin embargo, para muchos, aceptar esta simplicidad es inimaginable. Existe la creencia de que para poder sentir amor, alegría y ser libres, uno tiene que seguir una práctica meditativa complicada, hacer trabajo esclavista, o sacrificarse por el bien superior. Mientras que pasas tiempo en la naturaleza, podrías dejar de lado esas creencias y cambiar completamente tu mente.
Para hacer tu práctica lo más sencilla posible, aquí están mis consejos para esta semana:
- Utiliza tu respiración: Recuéstate sobre tu espalda y lleva tus piernas hacia la pared. Concéntrate en el vientre inflándolo y desinflándolo y permite que la sangre fluya hacia la cabeza, lo cual te ayudará a relajar la mente. Utiliza almohadas llenas de flores de lavanda para relajarte más profundamente o aceites esenciales de lavanda y vetiver. Olvídate de lo que debes hacer y lo que desees que suceda. Trata de permanecer en ese momento presente por un tiempo y tal vez cuando hayas terminado y estés completamente relajado, lo que deseabas ¡te esté esperando!
- Siente y conéctate: Toma un baño, quema incienso, usa hierbas naturales o aceites esenciales para la relajación: lavanda, menta, rosa, jazmín, ylang-ylang o incienso para sumergirte más en ti mismo.
- Nutre y cuida tu digestión: la sopa caliente, preparada con amor te ayudará a eliminar las posibles infecciones de tu cuerpo que son a menudo la causa de estrés. Las mejores sopas para cocinar son: zanahoria, espinaca, brócoli, pimiento verde o cualquier otra verdura que te guste. Para condimentar usa tomillo o mejorana. Para aquellos que sean amantes de la leche, prueba una mezcla de leche de cabra caliente con miel, mi favorita. Ésta ayuda con la producción de serotonina y crea un estado de ánimo relajado y positivo en el cerebro. Si no te gusta alguno de estos, prueba algunos tés como la manzanilla, hierbabuena, rosa o canela, estas son una buena opción para rejuvenecer y calmarte.
- Crea: Encuentra un lugar seguro y relajante, colorea una mandala o dibuja algo y luego observa tu creación, observa tus sentimientos, acéptalos con amor incondicional y luego deja que se vayan de nuevo. Permanece presente en el momento.
- Muévete conscientemente usando Asanas o posturas de Yoga para tranquilidad y paciencia: BALASANA – POSTURA DEL NIÑO.
No importa lo que elijas hacer esta semana, tómate algo de tiempo para cerrar los ojos tan a menudo como sea posible, disfrutar la belleza y la perfección del momento. Si tienes la oportunidad, comparte este momento con alguien, canta tu canción favorita, gira en círculos, baila, da saltos o grita. Sé agradecido.
Si tienes alguna pregunta, te gustaría compartir tus experiencias conmigo, discutir alguna de las técnicas en detalle, o reservar una sesión privada, escríbame a: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo..
